Acabo
de terminar de leerme la obra Geronimo busca casa, que va de un ratón
que se llama Geronimo Stilton y como todas las mañanas se despierta y se toma
el desayuno. Después se ducha y se viste. Y le quitó el polvo a su colección de
cortezas del siglo XVIII.
Cuando
llega a su trabajo en el periódico “El Eco del Roedor” se entera de que el
periódico va a desaparecer, y su abuelo (quien fundó el periódico) le dice que
tiene que vender su casa e invertir todo su dinero para que el periódico no
desaparezca.
Su
primo Trampita va a casa y se pone a arreglársela para venderla mejor.
Por
teléfono, un misterioso comprador quiere hacerse con la casa y le ofrece una
maleta de billetes. Geronimo, para que los trabajadores del periódico no
pierdan su empleo, acepta el trato. Y empieza a buscar una casa nueva para
vivir él, pero no encuentra ninguna, así que se mete en una casa pequeña de un
parque. Allí pasa la noche.
Al
día siguiente vuelve al periódico “El Eco del Roedor” y su abuelo le explica
que no hay crisis. Que nunca ha habido crisis. Y que todo ha sido una trampa
del roedor misterioso, que quería quedarse con su casa.
Después
de investigar, Geronimo descubre que el misterioso roedor no es otro que Sally
Ratonen, su enemiga número 1. La visita en su periódico “La Gaceta del Ratón” y
Geronimo le pide que le devuelva su casa. Ella acepta… siempre que Geronimo
consiga entrevistar al Larguirucho Boing, el jugador de baloncesto más bueno de
todos los tiempos.
Geronimo se acerca al jugador, pero uno de los guardaespaldas le impide que le haga la entrevista, empujándolo. Pero Geronimo salva de un accidente a la abuela de Boing y él, agradecido, responde a sus preguntas. Se hacen muy amigos. Y cuando Geronimo le enseña la entrevista a Sally Ratonen no tiene más remedio que devolverle su casa.
